23 enero, 2011

Comer bien en la medina: Dar Zellij



Nos topamos con este restaurante de casualidad, el cual se encontraba a dos calle de nuestro ryad. Su nombre Dar Zellij. El dar es considerado como uno de los más bellos de la ciudad (dar son lo Ryad de dos plantas) y data del siglo XVII. Todo ello le da de por sí un entorno mágico como escenario para la comida y, por si ello fuera poco, un músico ameniza la velada con su cítara... perfecto para cenas románticas o simplemente apacibles.

Normalmente se tiene que reservar, ya que suele estar bastante lleno. El restaurante ofrece solo unos 4 o 5 menús de diversos precios y opciones culinarias, todos, claro está, de comida tradicional marroquí. En los menús no se incluye bebida alguna. Las ensaladas con que abren la cena, repartida en muchos platitos, son francamente buenas, llenas de frescura y sabores sorprendentes. La pastilla, que sin ser tan buena como la que comimos en Fez, sin duda también era de calidad, crujiente y de sabores equilibrados entre lo dulce y salado. El tanjine de pollo es excelente, jugoso, punto justo de limón, cuscús de vegetales para acompañar...

El dar ofrece brunch y posee una extraordinaria terraza para poder tomar un trago y disfrutar de la noche al aire libre. La comida es muy buena sin llegar a extraordinaria, pero una cena amenizada en un dar como éste ya bien vale un recargo. Los menús oscilan entre los 36 y 50 euros sin bebida.
La atención es de primera, y al estar entre callecitas intrincadas, el restaurante recoge a los comensales en un punto si así lo solicitasen.

Aconsejo siempre averiguar los horarios, ya que dependiendo de la estación, el restaurante solo ofrece cenas.

Dar Zellij
C/ kaasour Sidi Ben Slimane,1
40 000 Marrakech
Teléfono: +212/ 524 38 26 27
Web: Dar Zellij








Fachada del restaurante

16 enero, 2011

Un viaje a través de los sentidos



En la medina antigua de Fez no existen demasiados restaurantes que recomendar, pero existe uno en un Riad, el Dar Bensouda, maravillosamente restaurado  y que data del siglo XVI, este palacio es el más antiguo que se conserva en la ciudad y perteneció a un profesor universitario Sidi Dawdi Bensouda.
Si no se alberga allí -altamente recomendable- como mínimo se merece adentrarse a sus espacios. El mejor té de menta que tomé en Marruecos ha sido allí, servido con delicadas pastas. Puede tomarse en su precioso patio interior, todo un oasis o bien en su magnífica terraza.
Ofrecen desayunos (inolvidables), almuerzos y cenas.



Su equipo de cocina está compuesto por varias mujeres que se dedican a trabajar para este pequeño establecimiento en el que el trato al cliente es digno de reyes. La comida es la tradicional marroquí, y destaca entre sus majares las pastilla de pichón, delicada en sus sabores y fresquísima, su clásica sopa harira y el tanjine de pollo con limón y olivas. Su apartados de vinos de la región están bien escogidos en los que se puede encontrar algunos muy dignos. Los postres son delicados y muy saludables.

Realmente el lugar es mágico, la comida muy buena y el servicio es de primera: chimenea, rosas rojas, manteles blancos, todo ello dentro de su hermosa y antigua arquitectura. Ciertas cenas se pueden gozar amenizadas por un cantante con su cítara.

Dar Bensouda 
Zkak El Bghel, 14
Quettanine, Medina de Fez
Fez, Marruecos
Web: Dar Bensouda
Teléf. : + 00212 5 24 39 16 09      






















Impresiones de la ciudad de Fez